El sur de Chile destaca por su riqueza natural y clima ideal para el cultivo de frutos rojos como frambuesas, frutillas y calafate. Además, es la principal zona del país productora de leche de la más alta calidad. La combinación de estos dos elementos le dan vida al cheesecake un postre versátil y perfecto para la Navidad, lleno de sabor chileno.
El cheesecake tiene una historia fascinante que se remonta a miles de años y que ha evolucionado a través las décadas y las culturas de los lugares a donde llega. El moderno “pastel de queso” se asocia comúnmente con Estados Unidos debido a que en 1929, el restaurante Lindy’s, en Nueva York, popularizó el “New York Cheesecake“, famoso por su textura densa y cremosa.
Este es un postre especial porque combina la suavidad del queso crema con el contraste de la base crujiente y coberturas dulces y ácidas como la mermelada de frutos rojos. El cheesecake es una opción ideal para la Navidad porque puede personalizarse con sabores de temporada como mermeladas de frutos rojos, especias como canela, jengibre o chocolate y nunca va a perder su esencia, sino adoptar una nueva.
Ingredientes
Para la base:
- 200 g de galletas de vainilla
- 100 g de mantequilla derretida
Para el relleno:
- 500 g de queso crema (a temperatura ambiente)
- 200 ml de crema para batir (bien fría)
- 150 g de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 3 huevos
Para la mermelada casera de frutos rojos:
- 300 g de frutos rojos, frutillas, frambuesas, arándanos y/o calafates.
- 150 g de azúcar
- 1 cucharada de jugo de limón
Preparación del Cheessecake
1. Prepara la base:
- Tritura las galletas hasta obtener un polvo fino.
- Mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta obtener una textura arenosa húmeda.
- Presiona la mezcla en el fondo de un molde desmontable (22 cm de diámetro) forrado con papel mantequilla.
- Lleva al refrigerador mientras preparas el relleno.
2. Prepara el relleno:
- Precalienta el horno a 160°C
- Bate el queso crema con el azúcar hasta obtener una mezcla suave.
- Añade la vainilla y los huevos, uno a uno, mezclando bien después de cada adición.
- Incorpora la crema para batir y mezcla hasta que todo esté integrado.
- Vierte el relleno sobre la base de galleta.
- Hornea al baño maría durante 50-60 minutos, o hasta que el centro esté ligeramente firme, pero que se mueva un poco.
- Apaga el horno y deja enfriar el cheesecake dentro del horno con la puerta entreabierta. Luego refrigera por al menos 4 horas, preferiblemente toda la noche.
3. Prepara la mermelada casera de frutos rojos:
- Coloca los frutos rojos, el azúcar y el jugo de limón en una cacerola a fuego medio.
- Cocina durante 10-15 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que la mezcla espese y los frutos se deshagan parcialmente.
- Si prefieres una textura más suave, puedes triturar la mermelada con una batidora de mano.
- Deja enfriar completamente antes de usar.
4. Monta el cheesecake:
- Una vez que el cheesecake esté frío, desmóldalo con cuidado.
- Extiende la mermelada casera sobre la superficie.
- Decora con frutos rojos y secos si lo deseas.
Tips finales:
- Baño maría: Asegúrate de que el molde esté bien sellado con papel aluminio para evitar que entre agua.
- Mermelada: Puedes ajustar la cantidad de azúcar dependiendo de la dulzura de los frutos rojos.
- Retira el cheesecake del horno cuando el centro aún esté ligeramente tembloroso. Seguirá cocinándose con el calor residual.
- Apaga el horno y deja la puerta entreabierta. Esto previene cambios bruscos de temperatura que podrían causar grietas.
¡Disfruta de un postre elegante, fresco y delicioso! ¿Te gustaría saber cómo decorarlo o hacer alguna variación? ¡Si las haces no te olvides de etiquetarnos en Instagram @datoavisos.cl para compartir tus creaciones con nuestra comunidad! 🍓✨
