Ya sea el primer tatuaje o uno de tantos, aprender a cuidarlo es vital para que el diseño se mantenga fresco y saludable por muchos años.
Cada vez estamos más acostumbrados a ver hombres y mujeres lucir tatuajes en la piel, convirtiéndola en una verdadera obra de arte. De hecho, el verano y los días calurosos son la ocasión perfecta para mostrarlos en público y, así, lo vemos en la playa o en cualquier centro vacacional. Sin embargo, hay ciertos cuidados a considerar para que luzcan frescos y saludables, ya que por muy oculto que esté siempre será susceptible al daño solar.
Para empezar, debemos explicar que los tatuajes se ubican en las dos primeras capas de la piel: primero, la aguja debe traspasar la epidermis, y luego, la tinta se deposita en la segunda, llamada dermis.
La penetración de los rayos ultravioleta en la piel y la dermis inevitablemente alcanza los pigmentos de colores de los que se compone el tatuaje (por ende, rompen el pigmento del diseño). Lo que significa que entre más oscura se vuelve la piel por la exposición al sol, más colores se desvanecerán, independientemente de cuán oscuros hayan sido desde el comienzo. De hecho, estar en exposición al sol por un tiempo prolongado y sin protección, puede causar decoloración, cicatrices o propagación del color, más aún, en los primeros meses después de realizar el tatuaje.
Entonces, cuáles son las consideraciones y cuidados que se deben tener quienes tienen tatuaje y se exponen al sol, aquí te contamos las más significativas:
🌞 Protector Solar: Es el mejor aliado y el compañero infaltable y, en lo posible, también durante los meses fríos. Si los tatuajes están ubicados en lugares más expuestos a la radiación solar, como brazos, piernas, mano o cuello, el cuidado también debe ser mayor.
🌞 Si el tatuaje es reciente, debes evitar el sol directo al menos durante cuatro semanas y hasta que la piel esté absolutamente cicatrizada.
🌞 El tatuaje, incluso después de años de su realización, siempre debe protegerse con una crema con protección solar muy alta, SPF 50+. Vuelve a aplicar 2 a 3 veces al día.
🌞 Evita nadar en el mar o en la piscina durante los primeros días. El estar en contacto con algunos agentes químicos e irritantes, como la sal y el cloro, también podría contribuir a la decoloración del tatuaje.
🌞Si te expones tus tatuajes al sol con frecuencia, es bueno que siempre estés chequeándolo para detectar cualquier signo visible de daño.
🌞El sudor es otro gran enemigo de los tatuajes y es una reacción al calor muy común en esta época. Si el tatuaje es reciente, es necesario mantener la zona lo más seca posible, ya que, al estar en constante humedad, la cicatrización es más lenta y, además, puede ser un ambiente propicio para la proliferación de alguna infección.
Recuerda que cuidar tatuajes, en esta época y durante todo el año, no solo es una forma de conservar en el tiempo la calidad y color del diseño, sino que es importantísimo para mantener una piel saludable.
