El interés que despiertan este tipo de objetos y artículos, es una oportunidad para emprendedores y un paraíso para los coleccionistas; pero, además, es una forma de consumo más responsable y sostenible.
A pesar de estar rodeado de tecnología y en un mundo inmerso en la digitalización, aún nos siguen cautivando los artículos vintage y las ferias retro. Un verdadero golpe nostálgico para mucho adulto joven y para quien son aún más mayores, también.
Las ferias retro y los artículos vintage son un portal que nos permiten experimentar la belleza del pasado, verdaderos tesoros de antaño que permiten conectarnos con la historia de una manera tangible y emocionante. Por otro lado, están los aficionados a las colecciones, pues estas ferias son el mejor espacio donde hacer hallazgos únicos.
Esta afición es la que llevó a Diego Urbina, más conocido como “Tío Chiches”, para crear Chiches y Cachureos. Una tienda online que nace no solo de la necesidad de tener artículos de colección retro vintage en, sino de darle valor también a juguetes reciclados, accesorios poco convencionales e importaciones chinas similares al nicho, marcando la diferencia entre este proyecto y otras tiendas del rubro.
“En el año 2016 tuve un accidente. Quedé con una cuenta enorme por hospitalización, mientras me trataba de recuperar (literal en silla de ruedas) empecé a vender en ferias y en la calle de ambulante. Al final me quedé con el formato online que es el más productivo”, relata Diego sobre el comienzo de su emprendimiento. Chiches y Cachureos logró consolidarse durante la pandemia, realizando envíos a todo Chile y exigiendo más y nuevos artículos constantemente.
Para responder a las solicitudes de coleccionistas y amantes de lo vintage, Diego busca en bodegas abandonadas, compra lotes, recorre distintas ferias de barrios, en una travesía que muchas veces los lleva a regiones buscando la mejor selección de productos. “La parte entretenida de este negocio es esa, creerse un poco una especie de buscador de tesoros y a la vez un Diógenes…ja, ja.”, agrega “Tío Chiche”.
“Feria Retro nace de la necesidad de juntar a todos los emprendimientos similares, llevarlos a un formato feria de exposición y ventas. Una especie de persa Bío Bío, pero que pudiera ser itinerante, en un espacio seguro y que ayudara a los emprendedores emergentes del nicho”. Con esta premisa, Diego, encabeza y produce la primera versión de Feria Retro el año 2021.
Sin duda que la atracción hacia lo vintage, nace del interés humano natural de conectarse con el pasado, lo que es la clave del éxito de los emprendimientos que emergen en torno a ellos. “El público de la feria es, en general, familiar, pero si tuviéramos que segmentar un nicho de consumo, según nuestros datos, es el adulto entre 25 y 42 años, adicto a la nostalgia y la temática retro vintage de los años 80, 90 y 2000”, afirma su organizador.
Con un promedio de 5 mil asistentes en cada versión, Feria Retro atrae gracias al encanto atemporal de muchos de estos objetivos y, con la llegada de la primavera, están planificando una cuarta versión.
Otro aporte muy significativo de este tipo de ferias y emprendimientos, es que una forma de dar una segunda vida a múltiples objetos, reduciendo el impacto ambiental y contribuyendo a un consumo más responsable.
Así que, la próxima vez que pases frente a una feria retro, vive la magia del pasado con un valor más sostenible hacia el consumo.
