Probablemente, uno de los principales desafíos a la hora de pensar en un negocio, es saber cómo hacerlo realidad en cuanto a financiamiento, créditos y una serie de elementos que muchas veces desconocemos. Por eso, la educación financiera se ha transformado en un indispensable para cualquier emprendedor.
Una de las principales características que se suele valorar positivamente, en cuanto a quienes toman la decisión de emprender, es la valentía. Porque más allá de la incertidumbre en torno a los resultados, varias personas comienzan este camino sin tener muchos conocimientos financieros, de marketing o de negocios. Emprender termina siendo un salto al vacío, que se sostiene en la motivación e ideas. Sin embargo, para que estos proyectos puedan crecer, es importante ir adquiriendo conocimientos y así aprovechar las oportunidades que se van presentando, de la misma forma que ir buscándolas.
En ese sentido, la educación financiera ha servido para empoderar a emprendedores y dueños de pequeñas y medianas empresas (PYMES), quienes van adquiriendo confianza y sobre todo, herramientas para salir y buscar aquello que muchas veces se vuelve una piedra de tope: financiamiento. Conocer cómo funciona el mercado, la seguridad que debería entregar un proyecto y las diferentes estrategias para empujar su crecimiento, es sin duda un buen piso para conseguir capital e inversionistas.
Pero no solo eso, la educación financiera permite tener mayor control del negocio y al mismo tiempo, advertir riesgos y adelantarse a escenarios de inestabilidad o pérdidas. Ya que mientras más conocimiento respecto al mercado y sus movimientos, las posibilidades de mantener el negocio en un terreno seguro y enfocado en las necesidades reales que este puede tener, aumentan considerablemente.
Por otro lado, es importante que a la hora de desarrollar una idea, implementar y poner en marcha un negocio, las personas conozcan cómo funciona la parte financiera y contable, ya que hay trámites que se deben realizar, como por ejemplo, trámites tributarios en el Servicio de Impuestos Internos (SII). Muchas veces, por los tecnicismos o falta de información, estos no se realizan cómo se debería.
Justamente para impulsar el desarrollo y crecimiento de las PYMES, entidades privadas y públicas están constantemente desarrollando fondos, programas o espacios de educación
financiera (y otras áreas). Porque entienden que parte del desarrollo económico del país es impulsado por el trabajo que realizan los emprendedores.
Son muchas las posibilidades disponibles que entregan bancos, organizaciones sin fines de lucro, empresas, fundaciones e instituciones estatales para fomentar el crecimiento de las medianas y pequeñas empresas. Por lo mismo, es importante informarse y buscar estos espacios de aprendizaje y herramientas para potenciar los negocios.
